*Compara marco a AMLO con GDO y LEA; Castañeda publica sus desvaríos.
De la redacción
El subcomandante “Marcos” y Cuauhtémoc Cárdenas, mediante diferentes formas, contribuyeron de forma importante al éxito del fraude electoral del 2006, contra Andrés Manuel López Obrador, que llevó a Felipe Calderón a la presidencia de la República. Uno por acción; el otro, por omisión.
Aquel año el vocero del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) llamó a no votar, a abstenerse en el proceso electoral. Entonces su voz era escuchada por muchas personas. Sin dicha instrucción, sus seguidores muy probablemente habrían votado por el actual presidente de la República, y de haber acudido a las urnas la ventaja del tabasqueño habría sido más amplia y no hubiese permitido el fraude, según análisis de “El Espectador”.
Cuauhtémoc Cárdenas, a su vez, por resentimiento derivado de que no pudo ser candidato presidencial de la izquierda por cuarta ocasión y ser reemplazado por López Obrador, se sustrajo de la campaña electoral de éste, lo cual se tradujo igualmente en que sus seguidores no votaran por el PRD. No brindó su apoyo abierta y decididamente, no llamó a apoyar al exjefe de Gobierno del Distrito Federal.
El exgobernador de Michoacán sigue sin mostrar respaldo decidido al gobierno morenista, pero Marcos ha ido más allá y el mes pasado publicó un texto en el cual, en una visión absurda, compara al presidente López Obrador con Gustavo Díaz Ordaz de represivo, y con Luis Echeverría; es decir, comete un segundo error, que deja dudas acerca si de verdad fueron errores o quiso servir a los intereses de la ultraderecha empresarial y de los ultraderechistas estadounidenses.
Fue público en el 2018 que quiso debilitar las posibilidades de triunfo de López Obrador, al intentar postular a una candidata independiente, pero fracasó, porque no consiguió los votos suficientes para obtener el registro, que de haberlo conseguido le hubiese quitados votos al candidato de Morena, no a Ricardo Anaya, del PAN; ni a José Antonio Meade, del PRI.
JORGE CASTAÑEDA DESVARÍA
Jorge Castañeda, uno de los intelectuales que llamaron a votar por Xóchitl Gálvez y no lo hicieron caso los electores, ahora desvaría y publica sus desvaríos. Sostiene que la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo no quiere la sobrerrepresentación.
Se le olvida que en la campaña electoral de la morenista llamó a votar para obtener la mayoría calificada en las cámaras del Congreso de la Unión, lo que obviamente no podía lograrse con los triunfos de mayoría, aunque se ganaran los 300 distritos, sino con los diputados y senadores de representación proporcional, como ocurrió; es decir, con la sobrerrepresentación que, según él, no quería.
