*Afectan por partida doble a los consumidores.
De la Redacción
El comercio organizado del país reconoció lo que aquí se ha difundido desde hace muchos meses: los productos que expenden al público tienen menos peso o volumen, y argumentan que es para que sean accesibles para las familias. Esta merma de contenido se da en el aceite comestible, detergentes y hasta en el pan de dulce y bolillo.
Lo cierto es que el golpe a la economía popular es por partida doble: venden productos con menos contenidos que el que tenían antes, pero ni siquiera mantienen los precios, son más caros, de manera que productores y comercios afectan y excluyen del consumo a millones de familias, que no pueden pagar más por menos contenido de las mercancías comestibles. Todo por ganar más.
Como ocurría en el período neoliberal, buscan ahora que sean los consumidores, incluyendo a los más pobres, quienes compensen las pérdidas que ambos sectores económicos sufrieron durante la pandemia de Covid-19, así como el golpe a sus bolsillos que significó el que el gobierno de la 4T haya dejado de perdonarles el pago de impuestos.