*Insiste en que ganará la gubernatura con alianza o sin alianza.
De la redacción
Los panistas parecen empeñados en mostrar desdén por el PRI en el Estado de México, y a la menor oportunidad insisten en que “con o sin” ese partido ganarán la gubernatura el próximo año, aunque sus votantes no llegan a 900 mil, en una entidad con una lista nominal de electores de aproximadamente 12.6 millones.
De la misma forma, como si deliberadamente buscara cancelar las posibilidades de esa coalición, al menospreciar a las y los aspirantes del PRI a la gubernatura, difunde sin recato alguno que su único interesado en la postulación aliancista, Enrique Vargas del Villar, es el mejor para derrotar a Morena en el Estado en 2023.
Esta posición nada conciliadora la volvieron a sostener en un acto público efectuado en el Teatro Morelos de la capital del Estado de México el 21 de este mes, tanto por el dirigente nacional del panismo, Marko Cortés, como por el propio Vargas del Villar, diputado y coordinador de sus pares y correligionarios en la Legislatura Local. Ambos insistieron en que ganarán la gubernatura aun sin la coalición.
El ex alcalde de Huixquilucan insiste desde hace tiempo en que él es el mejor candidato que podría apoyar la probable alianza electoral del PRI-PAN-PRD, y sería mejor mandatario estatal, en un desdén por la jerarquía política y administrativa de Ana Lilia Herrera Anzaldo, Alejandra del Mora Vela y Ricardo Aguilar Castillo, cuadros del partido que gobierna el Estado de México.
En ese acto del Teatro Morelos estuvieron presentes los gobernadores panistas de Querétaro, Mauricio Kuri González; de Yucatán, Mauricio Vila Dosal (de familia toluqueña); y Diego Sinhué Rodríguez, de Guanajuato.
Estaba programada la asistencia del ex presidente Vicente Fox Quesada, quien, al igual que Felipe Calderón Hinojosa, ya no militan en las filas panistas. Pero el también ex gobernador guanajuatense, Fox, no llegó al acto, generando especulaciones.
Muchos asistentes comentaron que Fox Quesada no es bien visto en el panismo, por haber apoyado a candidatos presidenciales del PRI, contra los abanderados del partido que lo llevó a la gubernatura de la entidad ubicada en el Bajío y a la presidencia de la República.
Hasta ahora el PRI ha guardado una posición prudente ante la posición de su posible aliado que, al menos en el discurso, públicamente lo desdeña y menosprecia, cuando se trata del partido que gobierna en el Estado y tiene una clientela electoral o “voto duro”, como también le dicen, del doble de la panista y dispone de varios cuadros experimentados.
Eric Sevilla Montes de Oca, respondió hace días a declaraciones de Vargas del Villar que la negociación con el PAN para una posible alianza electoral se haría con su dirigencia, no con los aspirantes, pero ahora fueron los mandos nacionales del panismo quienes reiteraron que ganarán con el PRI o sin él.
