*La obesidad, requiere atención desde diversas perspectivas: egresados de UAEMéx.
De la redacción
Las enfermedades crónicas que más afectan a la población mexicana están relacionadas con la obesidad, la cual afecta a un alto porcentaje de mexicanas y mexicanos y aparece desde la infancia.
Este padecimiento o transmisible se ha convertido en un problema de salud pública que influye en el desarrollo de otras enfermedades. Por esta razón, la revista Universitaria presenta un dossier que incluye perspectivas integrales en relación con los factores que provocan este padecimiento, el impacto en la juventud universitaria y el apoyo.
Hasta hace unas décadas no se conocía sus causas y efectos en la salud de la población, inclusive se elogiaba a los niños que presentaban robustez. Esta condición se asociaba a una buena salud del niño, cuando en realidad era todo lo contrario.
De acuerdo con estadísticas de autoridades internacionales de salud, México ocupa el segundo lugar en el mundo en obesidad y sobrepeso en la población adulta; sólo superado por Estados Unidos, pero está colocado en el primer lugar en obesidad y sobrepeso de niñas y niños en el planeta.
En el primer texto, egresadas de la UAEMéx afirman que la obesidad afecta por igual la salud emocional y la mental. De forma específica, explican, es necesario evitar las etiquetas o estereotipos; por ejemplo, que las personas que lo padecen son sedentarias o “flojas”, situación que no aplica en todos los casos y solo crea barreras para la búsqueda de atención y prevención.
El segundo texto presenta los hallazgos de un estudio en alumnos de distintos espacios universitarios. Durante la investigación, el equipo observó que la frecuencia de sobrepeso (28.08%) fue mayor a la de obesidad (7.59%) y, en ambos casos, los hombres son mayoría. “Este patrón podría estar relacionado con diferencias en los comportamientos alimentarios y de actividad física entre ambos sexos”.
Aunque los resultados no parecen alarmantes, la posibilidad de riesgo persiste. Por ello, las integrantes de este estudio recalcan la urgencia de promover estilos de vida saludables y campañas que fortalezcan todas las áreas implicadas como el deporte y la atención psicológica.
El tercero y último texto del dossier se enfoca en la contribución del trabajo social para las personas con obesidad. Desde este campo, se puede orientar al paciente y hacer un análisis contextual. La finalidad, comentan las autoras, es alcanzar el bienestar familiar, laboral y comunitario, pues de ello depende la adherencia al tratamiento y así mejorar la calidad de vida.
