COOORDENADAS POLÍTICAS
MACARIO LOZANO R.
ALERTAN BANCOS POR ALZA DE FRAUDES CIBERNÉTICOS
Los avances tecnológicos en el campo de la información y las telecomunicaciones trajeron aparejados el aumento de fraudes financieros perpetrados con el empleo de los sistemas digitales. La situación es grave y afecta a empresas, instituciones públicas y personas, como lo están alertando los bancos a sus clientes.
Dichas instituciones bancarias intensificaron en las últimas semanas sus campañas informativas y de orientación a sus deudores y ahorradores, para evitar ser víctimas de profesionales del delito de fraude, perpetrado mediante sistemas que permiten obtener información de cuentas de depósitos, débito o crédito, para luego saquearlas. Muchos sospechan que funcionarios o empleados de los propios bancos participan en las estafas, pero no está comprobado y no hay datos sobre personas capturadas por sus fechorías.
La información a los clientes de bancos para evitar fraudes contiene indicaciones en el sentido de que no deben atenderse llamadas telefónicas provenientes de supuestos directivos bancarios, quienes alertan de actividades sospechosas e inusuales en sus cuentas, por lo que debe actuarse de inmediato para evitar un daño patrimonial, para lo que se requiere de información. De esta forma podrá evitarse que se le carguen montos cuantiosos a sus ahorros. Para evitarlo deben recibir respaldo del directivo bancario, a fin de que coloque los cargos como “no reconocidos”
Se trata de gente ajena a los bancos y experimentada en engaños y confusión de las víctimas, de quienes obtienen en segundo la confianza del o la cuentahabiente, al grado de que en su afán de evitar que les quiten dinero, entregan datos confidenciales, como la contraseña de acceso a la cuenta, el código del Netkey, conocido también como “Token”. Los defraudadores también piden que para proteger el dinero lo transfieran a una cuenta emergente, que en realidad es la de ellos, de donde retiran el depósito en el instante.
Ante el aumento acelerado de este tipo de fraudes, los bancos recomiendan no perder la calma cuando supuestos ejecutivos les avisen de la detección de “movimientos inusuales en sus cuentas”, no confiarle datos confidenciales, y no creerles a los defraudadores, y no llamar a números telefónicos que les indican los delincuentes cibernéticos para confirmar la información, cuando se trata de teléfonos de la propia red de delincuentes.
Las advertencias de los bancos a sus clientes indican que el problema es grave y sigue creciendo, porque se trata de grupos delictivos organizados y altamente calificados en el tipo de delitos a los que se dedican. No utilizan la fuerza, ni las amenazas, ni intimidan; al contrario, proceden con propiedad, con lenguaje amable, tranquilo, que genera confianza a las personas y las predispone a entregar la información que le solicitan.
Así, con el pretexto de ayudar a los cuentahabientes de bancos a evitar el saqueo de sus cuentas, son estos delincuentes los que vacían los fondos depositados, con la agravante de que los daños patrimoniales de este tipo no pueden recuperarse, porque las operaciones se hacen con la información confidencial que sólo posee el ahorrador, por lo que legalmente son considerados como retiros del dueño del dinero; es decir, no procede lo “movimientos y cargos no reconocidos”. Pierde el cliente del banco.