*Recibirán terribles presiones para que violen la ley y sean parciales.
De la redacción
Los consejeros del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) tendrán el próximo año el mayor desafío en su historia: el proceso para elegir titular del Poder Ejecutivo mexiquense, con un gobierno federal empeñado en la lucha contra la corrupción, por un lado; y por otro, los poderosos intereses priístas locales y nacionales involucrados en esa contienda, anticiparon editorialista y articulistas de “El Espectador”.
Entre los entrevistados estuvo Jorge Iván Frausto Leal, y fue quién más se extendió en sus opiniones. Detalló que entre los intereses políticos nacionales y estatales destaca la necesidad de sobrevivencia del PRI y su futuro, pues si pierde el Estado, y aun suponiendo que conservara Coahuila, sólo tendrá dos entidades federativas de las menos pobladas. Entre ese estado y Durango, sus gobernados no llegarían a los 5 millones; es decir, menos de la tercera parte de los que tiene en Edoméx y menos del 4 por ciento de los habitantes del país. El partido podría enfrentar su extinción.
Además de esos intereses, abundó, también están los de la alianza PRI-PAN-PRD, urgida de frenar la expansión de Morena antes de la elección presidencial del 2024, para intentar al menos dar pelea en esa contienda, en la cual la lista nominal mexiquense les es clave.
Frausto Leal sostuvo que conservar el Estado de México es un asunto de sobrevivencia económica para la clase política y los cuadros del PRI pues, de perder aquí, además de poner en riesgo su registro nacional, se cancelaría la posibilidad de darle refugio en la nómina mexiquense a tantos priistas damnificados por la pérdida de gubernaturas en otras entidades federativas, y del ejecutivo federal en 2018.
Otros colaboradores de “El Espectador” se refirieron a su vez a los actores económicos y poderes fácticos que operan en suelo mexiquense y son beneficiados por un gasto público superior a los 320 mil millones de pesos anuales, los cuales no están dispuestos a perder privilegios con un gobierno que no esté a su servicio.
Finalmente, advirtieron, “tampoco deben soslayarse tampoco los intereses ilícitos y francamente criminales que operan en suelo mexiquense y no desean un cambio en las condiciones que tienen para sus actividades delictivas”.
Con estas circunstancias políticas, electorales, económicas, sociales y delictivas, los consejeros del IEEM “estarán sujetos a fuertes presiones por varios frentes, como nunca lo estuvieron antes, para que abandonen la imparcialidad a que están obligados y se aparten de la ley en beneficio de una de las partes involucradas en la disputa por el Estado de México”, destacó Frausto Leal.
La más obligada a resistir presiones, despojarse de fobias y filias y a acreditar su vocación democrática es la nueva consejera presidente, Amalia Pulido Gómez, porque su elección fue cuestionada por el principal partido del país.
Se le consideró vinculada al poder público estatal, inclusive por lazos familiares, y con animadversión al presidente Andrés Manuel López Obrador, a Morena y a la cuarta transformación, de lo cual, según los morenistas, ha dado abundantes pruebas en Internet y “deberá demostrar con imparcialidad y apego a la ley que son infundados los cuestionamientos”, concluyó el analista político.