*El proyecto fue descalificado sin basez alguna durante su ejecución.
De la redacción
El Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles”, cuyo proyecto fue severamente criticado y descalificado tan pronto se anunció en el anterior gobierno federal, quedó entre los 6 más bellos del mundo. En diciembre fue reconocido por la organización internacional de arquitectos “Prix Versailles”, la cual cuenta con el aval de la UNESCO, agencia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para la educación, ciencia y arte.
La distinción quedó concretada al develarse una placa en sus instalaciones ubicadas en el municipio de Tecámac, lo que constituyó un desmentido a los ataques que sufrió la obra ejecutada en tiempo record y con baja inversión. Estuvo a cargo de ingenieros militares, después de que se canceló la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), que se llevaba a cabo en los pantanos del ex vaso del Lago de Texcoco.
Los poderosos intereses económicos involucrados en esa megaobra, incluyendo los de propietarios de grandes medios informativos, reaccionaron con virulencia y atacaron y descalificaron la decisión del entonces presidente Andrés Manuel López Obrador. Inventaron muchos inconvenientes y daños para el país.
Una vez concluido el AIFA, los medios in formativos de circulación nacional dijeron era que en realidad era una especie de terminal de autobuses de tercera categoría. Antes auguraron accidentes aéreos y sobreprecios. El reconocimiento del AIFA como el segundo de los 6 más bellos del mundo: Abu Dhabi, Emiratos Árabes Unidos; Shangi, Singapur; Bangkok, Tailandia; Al Logan, Boston (Estados Unidos”; y del mismo país, el de Kansas City.
Los detractores guardan silencio, y ni por equivocación se disculpan con sus lectores, televidentes y radioescuchas, pero su información falsa y sus opiniones sin bases y de mala fe quedaron al desnudo.
La organización especializada en el tema, integrada por especialistas de diversos países, premió al AIFA por su composición arquitectónica sobresaliente. La distinción fue otorgada en diciembre, en París, Francia, pero la constancia de ella se materializó en una placa develada en las instalaciones del AIFA, hace unos días.
