De la Redacción
A partir de hoy se dará una campaña de desprestigio en contra del gobierno federal, por parte de poderosos intereses económicos nacionales y extranjeros y sus medios informativos, por la iniciativa de reforma constitucional presentada para recuperar de la rectoría económica del Estado Mexicano en materia de generación y comercialización de energía eléctrica.
La reforma a los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución del país, no prevé la cancelación de los contratos en poder de empresarios del país y del extranjero, pero fija un límite a su participación en la generación y comercialización del flujo eléctrico a menos del 46 por ciento.
También deroga la figura de “asociados”, que permitía a grandes consumidores disfrazarse de socios de las empresas privadas, para recibir una serie de subsidios.
Desaparecerían igualmente las comisiones Nacional de Hidrocarburo y la Reguladora de Energía.
Los intereses privilegiados con la privatización parcial de la industria eléctrica, nacionalizada en 1960 por el mexiquense Adolfo López Mateos, no se quedarán cruzados de brazos y se prevé lancen una campaña de calumnias en los medios, que en realidad ya la sostenían para evitar se legislara para suprimirles privilegios.